Hay un fenómeno mental definido por psicólogos y psiquiatras con el nombre de “complejo” o “síndrome de Eróstrato” por esa tendencia de querer pasar a la historia o tener un minuto de gloria, de los mediocres, por medio del magnicidio.
Al parecer, desde siempre ha habido personas que, en su afán de ser famosos y estar en boca de todos, se centran únicamente en conseguir que se hable de ellos. No importa si se habla bien o si se habla mal, lo que interesa es que se hable.